Todo sobre la compra venta de tarjetas regalo de segunda mano

Entradas

tarjetas segunda mano

Tarjetas regalo de segunda mano, ¡existen!

Seguramente cuando hayas leído el título de nuestro artículo de hoy te hayas sorprendido. Es cierto que siempre ha habido un gran negocio en la compra venta de objetos de segunda mano, incluso el negocio ha aumentado en los últimos años en los que la crisis económica ha hecho que los ciudadanos agudicen el ingenio para sacar un sobresueldo cuando es necesario. Pero hasta ahora a pocos se les habría ocurrido pensar en un mercado para las tarjetas regalo de segunda mano.

Pues existe y funciona muy bien, porque tiene beneficios tanto para el comprador como para el vendedor. Todos quedan contentos y una tarjeta avocada al olvido cobra vida en manos de un nuevo dueño.

¿Es posible que alguien quiera vender su tarjeta de regalo? Así es. Pensad que vender una tarjeta de regalo es igual que devolver un paquete que no nos ha gustado, todos lo hemos hecho alguna vez, con las tarjetas no debería ser distinto a pesar de que no es un regalo tan tangible.

Si no se te había pasado por la cabeza, ya lo sabes, si alguna vez recibes una tarjeta de regalo que no termina de convencerte, puedes plantearte venderla de segunda mano. Quizá no se te ocurre un motivo por el que no pueda gustarte una tarjeta de regalo pero hay muchos. Puede que no te guste la tienda, o que en ese momento no haya nada en ella que te interese, o simplemente que creas que con el dinero puedes comprar otra cosa que te haría mucha más ilusión.

Si te encuentras en una de estas situaciones, no lo dudes y haz que el dinero que alguien ha invertido en tu regalo sirva para hacerte realmente feliz. El proceso es muy sencillo, solamente tienes que poner a la venta tu tarjeta con un pequeño descuento y ten enviaremos el dinero donde quieras. En poco tiempo podrás disponer del dinero para gastarlo en lo que quieras.

Y si decides comprar una tarjeta de regalo de segunda mano tendrás la oportunidad de comprarla a precio más bajo de su valor real, un pequeño descuento que no te vendrá nada mal.